lunes, 12 de diciembre de 2011

Capítulo 1: La historia de un mono en blanco.

Un mono suelto por la ciudad... ¡Increíble! Tanto ha cambiado mi vida en los últimos meses que noto que soy otro, otro mejor. Aunque creo que mi historia todavía no ha empezado, creo que todavía está en blanco. Saltando de coche en coche sin miedo a que me pillen, asustando a los ancianitos que van a comprar el pan con sus carritos de la compra y dándome igual que la gente diga: "¡Mira, un mono con camisa!",noto que mi vida todavía no ha dado ese vuelco en el que el negro se vuelve blanco y viceversa. Son tantas cosas en las que tengo que pensar cuando me echo a dormir... (Sí, un mono durmiendo, ¿nunca viste uno?. A demás, ¿qué te crees, que voy a dormir en una chabola rodeado de bichejos? ¡Que va, si yo vivo como un rey! Estando de ocupa en un piso de 50 metros cuadrados se vive genial, lo tienes que probar). Bueno, a lo que voy; tengo ganas de ser como King Kong, raptar a la chica más guapa que encuentre y llevármela a mi casa de la jungla mientras que su novio viene a rescatarla y lo aplasto con mi enorme puño. Ella vendrá corriendo y me dirá: "Oh, Mon, eres mi héroe. No podía quitarme a ese plasta de encima". Bueno, o quizás me de el típico bofetón que suena como una campanada... Eso no lo había pensado. Pero...,¿¡que bofetón me va a dar si no llega!? ¿Veis? En estas cosas pienso yo cuando me meto a dormir, en tonterías.

No hay comentarios:

Publicar un comentario